CON PERMISO

Una palabrita por favor,
antes de echar el último puñado de tierra,
con retroexcavadora como lo amerita la ocasión.
No será mucho, me dijo un amigo.
No sé si se refería a la retroexcavadora o a la pena pena pena.

El que esté libre de pecado, que apague el celular,
o a lo menos que se cambie de compañía,
me dijo otro, y me desafió a luchar por más antenas en las ciudades.

Qué culpa tienen los animales del cerro, me dijo,
ya tienen bastante con tanto palto, con tanta siembra ajena,
no he visto zorro alguno con pancarta protestando:
¡No más paltos! ¡Se nos acabaron los ratones!.
Somos otros los que desparramamos móviles parlantes, así como si nada.

El riesgo es un negocio,
que no es lo mismo: que negocio más riesgoso.
En eso estamos,
desde que lo encendemos, lo apagamos,y lo cambiamos
por uno más “bacán”.
Ojo, esto no es letra chica.

Pero, ¿cuál es el problema?,
Me importa de veras la plusvalía del sector, mmm?
Me importa la estética urbana, mmmm?
Me importa la salud…?:

Por ahí podríamos hablar: Me declaro un ignorante: Entonces el riesgo es el negocio.

Deja de fumar me dijeron hace algún tiempo…
Y deja de tomar, creo haber escuchado alguna vez también…

En cada llamada muero un poco
Entonces mi alma
se cuelga de la tristeza de los árboles casi verdes,
de la mirada en desconfianza de la señora de la esquina,
cuando me visto de ciudadano y le digo Buenos Días…

A propósito
Hay tantas cosas que matan.
Que no llegaron solas, allí fuimos caballos y carretas.
Hombres y mujeres notables,científicos, artistas, políticos y curas,
los niños al lado seguían jugando,
la gente común miraba jugar a los niños.
Que eso también vale a la hora del juicio final.


Dejémonos de cuentos,
Repito el riesgo es un negocio
Así se pague mes a mes en una resbaladiza y pulcra institución bancaria.
O desde el frío intangible e impenetrable, de esto que llaman redes sociales.
Lo que pasa es que algo queda para todos en este negocio.

Que paradójico: Los vientos que sujetan este grito prenden como rémoras personales,
parias de la prisa del sintiempo y de la nodistancia, ungidas en agua bendita,
y peligrosamente cerca del fuego en ciernes de nuestros hijos
A la vuelta que pase por aquí la protesta.

(¿Aló ,disculpa te llamo en seguida, estoy en un meeting en contra de una antena?)

“RANCAGUA.- La Corte de Apelaciones de Rancagua ordenó a la empresa de telefonía Entel PCS desmantelar una antena de telefonía celular emplazada en la localidad de Santa Cruz, Región de O' Higgins”
La palabra entonces viaja y crea ilusiones,
Globalización le llaman y le sienta bien,
El problema es que a mucho aire el globo se puede reventar.
La palabra muerte aún parece lejana,
aunque aún queda un poco de invierno entre las sábanas.

Podríamos hacer una réplica entre todos,
Y detener la hemorragia o responder la llamada.

Pero antes pidamos perdón,
no es necesario confesarse.
Necesaria es la humildad pedestre,
allí donde termina nuestro cuerpo y comienza la tierra,
que la tibiecita humildad olvidada y escondida,
llene poro a poro en ascendente movimiento todo nuestro cuerpo:
Para luego: Pedirnos perdón: Para luego pedirte perdón: Para luego: pedirles perdón.
Sin hablar (ni siquiera por celular)

Frío nos convocaste, a grito pela’o
Aparente Dios de la modernidad.
Entonces algunos a diez centímetros del suelo,
y en medio de lanas
y oraciones ancestrales a dioses ausentes,
inauguran día día la protesta.
Cuando todavía no se ha inventado el espejo
Del hombre dios
Que hace y deshace a pura materia
Este forado enorme en el alma humana.